Tarifas, combustible y la crisis del MAX golpean a Aerolíneas Argentinas

En el marco de la presentación del vuelo directo de temporada Ezeiza-Orlando, el presidente de Aerolíneas Argentinas comentó que “permanentemente estamos mirando la rentabilidad de las rutas y hoy sabemos que tenemos fuertes problemas de rentabilidad en nuestras rutas internacionales. Con el alza del precio del combustible y con la guerra de precios que se desató en el mercado argentino, pero que afecta al mercado global, hoy nuestra rentabilidad en todas las rutas internacionales está en discusión”.

En esa lucha por “una construcción de rentabilidad para nuestra flota internacional”, es que la compañía de bandera apostó por la ruta Ezeiza-Orlando. Con la decisión de quitar frecuencias en los vuelos hacia Nueva York y Roma –entre el 9 de diciembre y el 21 de marzo- y así tener flota disponible para la nueva operación, lo que se intenta es “ir detrás de la demanda” para asegurarse llenos máximos.

“Un desafío importante al que se enfrenta Aerolíneas es cómo minimizar los subsidios que recibe del estado”, dijo Malvido, por eso “la gimnasia de abrir rutas, probar dónde esta la demanda, ver el camino adecuado para rentabilizar nuestra flota, es permanente”.

Más ayuda del Estado

En conferencia de prensa Luis Malvido habló del “camino descendente de subsidios” por el que ha avanzado Aerolíneas Argentinas, aunque reconoció que el contexto nacional e internacional alterarán esa tendencia. (Ver: Suba del dólar y el petróleo impactaron en Aerolíneas Argentinas)

“Logramos bajar los subsidios de 700, 800 y 900 millones (de dólares) por año. Ya llevamos dos años consecutivos de 200 millones, lo cual sigue siendo enorme, sobre todo si se pone en perspectiva de todo lo que puede hacer el Estado con esa cifra”, expresó, para luego remarcar que el monto “sigue siendo desproporcionado para una aerolínea”.

El presidente del grupo aéreo estatal aseguró que “nuestra operación está muy, muy desafiada mes a mes, y por lo tanto creemos que va a ser díficil estar en los niveles (de subsidios) de los últimos dos años”. Si bien manifestó que es imposible anticipar qué cantidad de dinero se requerirá del Estado argentino, “porque dependerá de variables que no controlamos y de otras que sí”, dejó en claro que “el desafío sigue siendo acercarnos a la cifra (del año pasado) pero sabemos que vamos a estar por arriba”.

Luis Malvido (presidente de Aerolíneas Argentinas) y Máximo Amadeo (Director Comercial)

La crisis del 737 MAX

Por último Luis Malvido aseguró que haber tenido que dejar en tierra los cinco aviones Boeing 737 MAX 8, que conforman la flota de Aerolíneas Argentinas (70 aeronaves en total), supuso “una gran pérdida” para la compañía tanto en lucro cesante, como en comodidad para el pasajero.

“Cinco aviones en tierra para Aerolíneas es un enorme quebranto económico y déficit financiero” comentó, agregando que efectivamente “eso nos está aumentando el déficit”.

Si bien dejó en claro que “difícilmente sea este año”, el presidente del Grupo se mostró optimista ya que “por negociaciones con Boeing, llegaremos a un acuerdo donde compensarán esa pérdida”.