Cerró Cacciola, un golpe al transporte fluvial entre Argentina y Uruguay
Unos 50 trabajadores son afectados por el cierre de la empresa del grupo argentina ERSA
Publicada 01/07/19- Los catamaranes de la empresa de transporte fluvial del grupo argentino ERSA dejaron de navegar este domingo 30 de junio
- Cacciola cierra por efecto de la devaluación "la presión fiscal excesiva, los altos costos de operación y de financiamiento bancario" afirmó
- Según sus titulares, Cacciola deja de operar por "circunstancias económicas extraordinarias y ajenas al riesgo empresarial"
Cacciola cumplió este domingo 30 de junio sus últimas frecuencias entre Tigre (Argentina) y Carmelo (Uruguay), la ruta internacional de pasajeros que cubría, además de brindar servicios entre Tigre y la isla binacional Martín García. Unos 50 trabajadores en Argentina y Uruguay fueron afectados por el cierre.
"Cacciola no ha sido ajena a la situación de caída de la actividad del transporte en general y en particular, la caída de los viajes al exterior, incluido Uruguay, por efecto de la devaluación de la moneda y el incremento del dólar estadounidense", indica la compañía de transporte fluvial en un comunicado en el que informa del cese a partir de junio de la prestación de servicios.
La decisión, señalaron desde la empresa, "se enmarca en el proceso de reestructuración de la empresa que se inició en octubre del 2018 con la presentación de su concurso preventivo de acreedores".
La operación de la naviera fue afectada por "los costos de operación internacionales dolarizados", que incluyen "la reparación y el mantenimiento de los buques, sus repuestos y gastos, para operar en condiciones seguras".
La compañía tenía unos 50 empleados en Argentina y Uruguay, para operar sus dos catamaranes con capacidad de entre 140 y 167 pasajeros.
En los telegramas colacionados enviados a los funcionarios la empresa justifica la decisión en “la extraordinaria disminución de ingresos producto de la caída en la cantidad de pasajeros transportados, la devaluación del peso argentino ante el dólar estadounidense, la presión fiscal excesiva, los altos costos de operación y de financiamiento bancario".
Según el grupo ERSA, propietario de Cacciola, se trata de "circunstancias económicas extraordinarias y ajenas al riesgo empresarial" que por ser "imprevisibles e inevitables, han generado una situación que no es imputable a la empresa".
En una carta enviada al director de Islas de la Provincia de Buenos Aires, Leonardo Gobelli, la empresa explica que "los avatares de la economía nacional, en la que una combinación de caída de la actividad, las altas tasas de interés y devaluación" de la moneda argentina influyeron negativamente y tornaron "insustentable la continuidad de la operación internacional".
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