“El turismo ecuatoriano está herido mortalmente”

Las fuerzas de seguridad de Ecuador intensificaron durante este domingo la represión contra las comunidades indígenas que desde hace una docena de días se vienen movilizando en todo el país contra el Gobierno del presidente Lenín Moreno, quien dictó el “toque de queda” en todo el territorio. Hasta el momento, la Defensoría del Pueblo de Ecuador ha contabilizado 7 víctimas fatales, 1340 heridos y 1152 detenidos, cifras que han sido también denunciadas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).

En medio de esta tragedia social, la economía del país ha quedado prácticamente paralizada y se teme que la situación se transforme en poco tiempo en una crisis humanitaria. Y el turismo ecuatoriano se contabiliza a sí mismo entre los sectores más afectados. “Una tienda cualquiera puede estar cerrada un mes y luego abrir sus puertas y volver a vender sus mercaderías, pero nosotros no. El turismo ecuatoriano está herido mortalmente, porque a las pérdidas actuales hay que sumarles la enorme dificultad que tendremos para recuperarnos de esto, por cómo ha dañado la imagen del país ante el mundo”, explicó a HOSTELTUR Holbach Muñetón, presidente de la Federación de Camaras de Turismo del Ecuador y del Guayas (Fenacaptur).

Holbach Muñeton

Mientras esperaba ser recibido de un momento a otro por el vicepresidente ecuatoriano, Otto Sonnenholzner, el referente del sector privado del turismo nacional aseguró que el estado de la actividad es “desesperante”.

Por empezar, el transporte ha quedado prácticamente paralizado en Quito y sus alrededores, tanto por vía terrestre como aérea. Guayaquil, logró sostener hasta el momento sus vuelos internacionales, pero no la mayoría de los nacionales, situación que se replica en muchas otras ciudades. Además, se han registrado hechos de violencia en casi todas las ciudades, incluyendo a hoteles. “Hay que ser categóricos y poder separar las protestas de los actos vandálicos. Estos vándalos sí han intentado entrar a robar a algunas propiedades, pero han sido repelidos. Hoy los hoteleros se están defendiendo a sí mismos. Afortunadamente, en ningún hubo daños significativos, ni a las personas, ni a las propiedades”, relató el directivo.

Dado el "toque de queda" y la paralización de los servicios aéreos, las autoridades recomendaron a los pasajeros no salir de los hoteles y mantenerse en los aeropuertos, por los que los turistas nacionales e internacionales varados se cuentan por miles en todo el país.

Los privados marcharon en Guayaquil en favor de la paz

Como consecuencia de todo este escenario, la ocupación hotelera se redujo a su mínima expresión. Muñetón sostuvo que la ocupación nacional -la cual es muy difícil de medir en este contexto- va del 0% al 5%. Este indicador parcial e improvisado se logró gracias a que las cámaras locales fueron brindando sus números como pudieron.

Finalmente, y en referencia a las afectaciones de mediano y largo plazo, el directivo contó que en los últimos días toda la industria ha ido recibiendo una catarata de cancelaciones: estadías, excursiones, eventos, vuelos, transfers y alquileres de autos, entre muchos otros servicios. “Estamos viviendo una crisis sin precedentes en el país, de la cual será muy difícil recuperarse. Hemos vivido conflictos, pero nunca pasó de algunos neumáticos incendiados en la calle o alguna barricada. Esto nos pone en una situación desesperante, y esperamos que pueda solucionarse cuanto antes. Para eso, todos deben sentarse a una mesa y llegar rápidamente a un acuerdo, para que Ecuador vuelva a la paz y siga creciendo”, concluyó.