Mirones: “No hay que desestimar la potencialidad y el aporte del turismo a la economía”

Previo a la conferencia de OMT sobre desestacionalización en Punta del Este, Mirones se reunió con empresarios turísticos miembros de la Cámara Argentina de Turismo (CAT), para interiorizarse sobre la realidad del sector en el país y poner en agenda propuestas e iniciativas en las que Argentina es pionera, como el Observatorio de Derecho Turístico o la Defensoría del Turista.

En conversación con HOSTELTUR noticias de turismo aclaró que para romper la estacionalidad en los destinos “no hay recetas mágicas” y por eso “cada país debe aprovechar sus recursos e infraestructuras”.

La estacionalidad es un problema que se repite en destinos de todo el mundo ¿cuál considera que es la clave para conseguir turismo todo el año?

Es difícil encontrar fórmulas de actuación que sirvan como modelos a gobiernos. Creo que cada país tiene que elegir los ejes vertebradores de su política de desestacionalización y lo tiene que hacer aprovechando las infraestructuras que están generadas o que estén en proyecto en forma inmediata para ponerlos en valor; también es importante la realización de estudios de mercado previo, para ver de qué manera se pueden desarrollar y la aplicación de planes de promoción y planes estratégicos de ejecución a continuación.

Lo importante entonces es aprovechar los recursos propios

Esta es una sistemática de trabajo en la que en muchas ocasiones nos olvidamos que tenemos cosas suficientes para poner en valor  y estamos buscando cosas mágicas, es importante no olvidarse de las señas de identidad propias, de las infraestructuras o recursos que el esfuerzo de muchas generaciones han logrado poner arriba de la mesa. A esta generación lo que nos toca es sacarle todo el valor y ser capaces de comercializarlas y venderlas adecuadamente; a lo mejor también hacerlas evolucionar para lanzarlas al mercado actual, pero nunca desdeñarlas.

En Argentina de a poco la estacionalidad se ha ido rompiendo porque se ha apostado a la segmentación y se explota mucho por ejemplo el turismo de reuniones

En el caso concreto de Argentina, creo que es uno de los países más ricos del mundo en muchísimos aspectos. Tiene una potencialidad de desarrollo turístico muy importante mediante la puesta en valor de recursos e infraestructuras que ya tienen creadas.

Además el gobierno nacional impulsó una política de feriados que permite que haya movimiento todo el año, aunque es muy cuestionada por los sectores industriales.

Este es un debate que existe no solo en Argentina, sino en varios lugares del mundo porque de alguna manera siempre está en cuestión qué modelo es mejor aplicar: si el que beneficie al sector industrial o al sector turístico, como motor que es de muchas zonas.

Izq a der: Marcos Palacios, Miguel Mirones, Jordi Busquets.

En Argentina, los cuestionamientos tienen que ver con que hay cerca de 20 días no laborales y que eso paraliza a la industria y afecta a la economía del país

Creo que es difícil dar una receta general porque la casuística y los componentes económicos de cada zona tienen que tener un peso muy importante. Si bien no existe una receta general, sí hay una realidad general y es que nunca hay que desdeñar la potencialidad y el aporte importante que el sector turístico hace a la economía de un país y que está además en crecimiento.

Considerada entonces que en todo el mundo el sector está un poco subestimado.

Por suerte cada vez menos y considero que las opiniones del sector turístico deben ser tenidas en cuenta por los gobiernos de todo el mundo a la hora de definir políticas transversales que puedan beneficiar o perjudicar al sector.

Usted además de ser presidente de los Miembros Afiliados a la OMT, está a la cabeza del Instituto para la Calidad Turística Española (ICTE), ¿cree que el sector se está concientizando en la importancia que tiene ofrecer servicios de calidad?

En el mundo del turismo la cultura de la calidad se ha incorporado bastante más tarde que en otros sectores productivos. La implantación de sistemas de calidad es una constante desde hace décadas, pero en el sector turístico ha habido una cierta resistencia a la implementación y se está logrando vencer poco a poco. De hecho ya están en desarrollo normas internacionales de calidad en unos diez subsectores, pero todavía no en áreas importantes como el alojamiento, la restauración o la intermediación. Igual creo que termina llegando porque un sistema de calidad aporta garantía al usuario.

¿Cómo ve el caso concreto de Argentina?

En América en general y Argentina en particular la calidad turística ha sido bien entendida, tanto por el sector privado como por el gobierno, y se está implementando e intentando desarrollar un modelo concreto.

La intención es crear para fin de año el Instituto de Calidad Turística de Argentina ¿el ICTE ha asesorado?

Estamos en conversaciones pero no formales. En estos días espero tener oportunidad de charlarlo con los representantes públicos y privados para poder seguir un camino conjunto. Como miembro del ICTE me pongo a disposición para colaborar en esa implantación, en la medida de lo posible, porque entendemos que al final esto es una cadena y cuanto más países y regiones se incorporen, el turista terminará haciendo una validación mayor de los sistemas y las marcas de calidad, porque encontraría referencias similares en las distintas partes del mundo.