“Ecuador en vez de darnos un salvataje nos pone impuestos”

Ecuador es, sin dudas, uno de los países latinoamericanos en los que el COVID-19 ha causado mayor impacto. Más allá de las cifras oficiales, diversos videos, fotos y audios se hicieron virales y dieron la vuelta al mundo mostrando el desborde de su sistema sanitario, pero también se mezclaron con numerosas fake news y exageraciones propias de contextos de gran incertidumbre.

Para explicar de primera mano cuál es la situación real de Ecuador hoy y, principalmente de su actividad turística, HOSTELTUR entrevistó de manera virtual a Holbach Muñetón, presidente de la Federación Nacional de Cámaras Provinciales de Turismo del Ecuador (Fenacaptur), que representa a un amplio espectro de actores de la industria y mantiene diálogo permanente con las autoridades nacionales.

El directivo admitió que es cierto que en una primera instancia “algunas cosas se desbordaron”, pero sostuvo que ningún destino del mundo estaba preparado para esta pandemia, como queda demostrado en las grandes potencias europeas o en Estados Unidos. Asimismo, aseguró que la curva de contagios está aplanándose y ya se espera que el 4 de mayo regrese “programadamente” la actividad para la construcción y el delivery de electrodomésticos y otros productos.

Sin embargo, recordó que las empresas turísticas, que el año pasado generaron US$ 2.280 millones, hoy están “literalmente cerradas”.

“Estamos entre la quiebra de nuestro negocio y la muerte”, afirmó Muñetón, argumentando que el Gobierno de Lenín Moreno no sólo no le ha dado ningún paliativo a la actividad sino que, por el contrario, les impuso nuevos impuestos.

En ese aspecto subrayó que ni siquiera están solicitando subsidios: “No les pedimos dinero; lo que les pedimos es tiempo, que todas mis deudas se prorroguen a enero de 2021, pese a que, en realidad, no sabemos qué tiempo va a demorar esta pandemia. Nos dicen mayo, pero, ¿qué tal si salimos a trabajar, hay un rebrote fuerte y nos dicen que julio y agosto nos volvamos dos meses a casa?”.

Finalmente, contó que le han solicitado al Gobierno “suprimir feriados por lo menos por dos años”, ya que “no se pueden propiciar aglomeraciones” y, además, porque “los feriados dinamizan dinero, pero no lo producen”. Como contrapartida, propuso una fuerte campaña para el turismo interno para todos los fines de semana, mientras se replantear la estrategia internacional de cara a los nuevos turistas que podrían viajar a Ecuador.