Crisis y oportunidad: ¿será 2021 un buen año para inversiones hoteleras?

Dicen que toda crisis tiene ganadores y perdedores, pero si una característica general tiene la pandemia de coronavirus es que ha afectado a grandes y chicos por igual, a lo largo de todo el planeta. Y muy especialmente a la industria de los viajes. Sin embargo, a medida que las fronteras internas y externas empiezan a abrirse y las operaciones se van reanudando bajo estrictos protocolos, ¿es posible hallar hoy oportunidades de negocio para el mediano y largo plazo?

Según numerosas encuestas a nivel global y regional, la mayor parte de los pasajeros analizar volver a viajar recién a partir de seis meses después de que se levanten las cuarentenas, lo que sitúa el horizonte de recuperación del sector ya en 2021. Esto, más allá de que en muchos países, provincias, estados o ciudades ya se empiezan a movilizar incipientemente el transporte y la hotelería.

En ese contexto, HOSTELTUR entrevistó a Arturo Navarro Ithuralde, CEO de Aadesa, la organización de gestión hotelera que administra unos 20 hoteles entre Argentina y Uruguay, quien analizó el presente y las perspectivas de estos dos países en materia turística y también se refirió a las posibilidades concretas de inversión en estos mercados y en Sudamérica.

El directivo señaló que el sector hotelero, a diferencia de la mayor parte de la industria turística, vive actualmente “una crisis de capital de trabajo que no hace peligrar el patrimonio general”, ya que los hoteles son activos que valen millones de dólares. Y remarcó que en el caso de Argentina la actividad hotelera venía de algunos de los mejores meses de su historia por lo que, “si los empresarios hicieron las cosas bien deberían estar en condiciones de afrontar hasta unos 120 días sin ingresos, que muchas veces coincide con la estacionalidad de algún destino”.

Además, entre las claves para entender 2021 como oportunidad, puntualmente en el caso de Argentina, destacó las ventajas cambiarias del país, que permiten encontrar precios accesibles para el desarrollo y para asegurar una “buena rentabilidad”.

Teniendo en cuenta ese escenario, explica Navarro Ithuralde, ya se están generando oportunidades entre empresarios que tienen la propiedad pero no se encuentran en condiciones de operarlas, al menos “sin el apoyo de una cadena”, es decir, con estrategias, procesos y canales de distribución como los que Aadesa ha desarrollado durante la pandemia, en referencia a TripOn, que es la plataforma online de experiencias en los destinos en los que tienen propiedades.

Finalmente, ratificó el interés de la organización en expandirse regionalmente, pero bajo el mismo modelo de “cercanía con los inversores”, por lo cual descarta avanzar por ahora en plazas que les resultan interesantes como Perú y Colombia, pero sí analizan hacerlo en Chile, Paraguay y Bolivia, mercados que abrirán “cuando se den las oportunidades”.