Semestre negro para American Airlines: US$ 4.308 millones de pérdidas

La semana pasada, Delta Air Lines publicó sus resultados operativos correspondientes al primer semestre de 2020, y acusó pérdidas por US$ 6.251 millones. Este jueves 23 de julio fue el turno de American Airlines para mostrar cuán profundo fue el impacto de la pandemia de coronavirus en la empresa. Y también en estos días lo harán Southwest y United. La suma de todos estos resultados darán una cabal visión del estado en el que quedan los cielos de los Estados Unidos ante la “nueva normalidad”.

Las pérdidas informadas por American Airlines alcanzan los US$ 4.308 millones, frente a las ganancias de US$ 847 millones que había registrado durante el mismo período de 2019; todo esto, explicaron, como consecuencia del desplome de la demanda global de viajes provocado por el COVID-19.

Estos números negros para la empresa se explican por la caída del 55% en su facturación operativa semestral, que ascendió a los US$ 10.137 millones, pese a una cierta "mejora" de la demanda de pasajeros en mayo y junio tras "tocar fondo" en abril, según señaló la empresa a través de un comunicado.

“Ha sido uno de los semestres más complicados de la historia de American Airlines”, aseguró el máximo ejecutivo de la aerolínea, Doug Parker, quien destacó sus esfuerzos para "aumentar la liquidez, conservar efectivo y garantizar que los clientes viajen con seguridad".

Los malos resultados se explican, principalmente, por la mala performance entre abril y junio, cuando perdió US$ 2.067 millones, frente a los US$ 662 millones de ganancias que había verificado el año anterior. En ese aspecto, los ingresos de estos tres últimos meses experimentaron una caída aguda hasta US$ 1.622 millones, lo que supone un 86,4% menos respecto a los casi US$ 12.000 millones obtenidos en el segundo trimestre del ejercicio previo.

Un dato interesante aportado de manera extra por la empresa es que la incipiente reapertura de la economía había permitido mejorar las expectativas entre mayo y junio, pero los rebrotes pusieron nuevamente en alerta al sector en julio. “Aunque las tendencias de facturación de mayo y junio fueron alentadoras, la demanda se ha debilitado durante julio a medida que aumentaban los casos de COVID-19 y se imponían nuevas restricciones de viajes", agregaron, y anticiparon que durante el actual tercer trimestre se espera un descenso de su capacidad del 60%.

La aerolínea sostuvo que finalizó junio con una liquidez de US$ 10.200 millones, tras recibir un préstamo de US$ 4.750 millones por parte del Gobierno estadounidense, que dispuso un multimillonario paquete de auxilio, y luego de emitir deuda por US$ 1.200 millones.

Según el informe difundido, American Airlines “quemó” una media de US$ 55 millones de dólares diarios durante el segundo trimestre y logró reducir ese ritmo desde los US$ 100 millones de abril hasta los US$ 30 millones de junio, como señalaba, gracias a "una facturación más alta de lo estimado y el ahorro de las iniciativas de recorte de costes".

Como consecuencia, y tal como ya lo contó HOSTELTUR, aseguraron que esperan reducir sus gastos en US$ 15.000 millones para el conjunto de 2020, principalmente por el cierre de vuelos y rutas, pero también por la retirada de 150 aviones y la jubilación anticipada, reducción de horario o baja parcialmente remunerada de 41.000 empleados, además de la reducción de 5.100 puestos de gestión. En ese sentido, la empresa señala que hay "unos 20.000 trabajadores más en plantilla de los que necesita para operar su programación de otoño", por lo que sugiere que habrá más despidos o suspensiones.