Perú duplica su alcance en el trade gracias a la virtualidad

Del 23 al 27 de noviembre pasado se llevó a cabo una edición diferente del Perú Travel Mart, el principal encuentro de comercialización turística de Perú, que obligadamente tuvo que abandonar su formato físico para tener una edición virtual. Sin embargo, esa virtualidad parece haber jugado a favor del posicionamiento global del destino sudamericano.

Según lo informó la Comisión de Promoción del Perú para la Exportación y el Turismo (PromPerú), la edición 2020 logró captar 349 compradores internacionales, más que el doble que los registrados en 2019, cuando fueron 163. En total, un alza del 114%.

Además, creció un 45% la cantidad de oferentes nacionales (fueron unos 200) y un 43% el número de turoperadores internacionales inscriptos como buyers, teniendo en cuenta las ventajas de la virtualidad para salvar las distancias y los costos que hubieran implicado un encuentro presencial.

Asimismo, se incrementó la cantidad de países en un 43%: se pasó de 28 a 40, incluyendo en esta oportunidad a mercados como Dinamarca, Finlandia, Hungría, Indonesia y Noruega.

En total, aseguran que Perú Travel Mart permitió desarrollar unas 5.000 citas entre vendedores y compradores, con un potencial de negocios estimado en US$ 2,5 millones, lo cual resulta clave para impulsar la reactivación del país luego de los momentos más críticos de la pandemia.

La web del evento online tuvo 220 stands y recibió más de 4.800 visitas durante los cinco días del evento. Además, contó con nueve seminarios en los que se capacitaron 681 profesionales. Los temas que se abordaron fueron naturaleza y aventura; gastronomía; turismo cultural y comunitario; MICE; y alta gama.

Finalmente, PromPerú destacó que el encuentro virtual tuvo la certificación de carbono neutral, que fue otorgada por Green Initiative, institución acreditada por las Naciones Unidas. Se generó una tonelada de dióxido de carbono (CO2), huella que fue compensada combinando créditos de carbono generados por la ONU y complementados con la reforestación de árboles nativos, liderada por la Asociación Inkaterra, en la región selvática de Madre de Dios.