Cuba responsabiliza a turistas por casos récord y establece restricciones

Este domingo 10 de enero, Cuba vivió su tercer día consecutivo con récord de casos de COVID-19, con 388 positivos y 3 fallecidos. Y es que los números en la isla se aceleraron desde octubre, cuando el país inició sus desescalada turística internacional.

Esta situación llevó al país caribeño a imponer restricciones y establecer nuevos requisitos, como la presentación de un test PCR negativo, que entró en vigencia este mismo domingo; y una reducción de las frecuencias desde países como Estados Unidos, México y Panamá desde el 1° de enero.

Cuba resaponsabiliza a los turistas internacionales por el aumento récord de los casos en el país (Foto: EFE)

Pero, además, llevó al Gobierno a disponer este sábado nuevas medidas de prevención, porque más allá de todas las medidas en los primeros diez días del año se registraron 35 casos importados, y aún así eso significa una reducción respecto a los verificados en diciembre.

En efecto, las autoridades cubanas atribuyen el repunte actual a la indisciplina y al incumplimiento de las medidas preventivas y protocolos de aislamiento por parte de los viajeros que arriban del extranjero. Y eso llevó a dar marcha atrás con la desescalada en varias provincias, entre ellas La Habana, y el regreso de restricciones de las actividades públicas, así como nuevas limitaciones del transporte público.

Por ejemplo, la provincia de Santiago de Cuba reportó el domingo los números más altos, con 89 nuevos casos, teniendo en cuenta que este territorio no registró contagios durante varios meses de 2020. Y le sigue La Habana, con 85 positivos, que ha mantenido una incidencia alta de forma sostenida en los últimos dos meses, lo que motivó esta semana su retroceso de Fase 3 a Fase 1.

La Habana regresó a Fase 1 y, aunque no cerró su aeropuerto, tendrá numerosas restricciones

Con estos datos en la mano, el Consejo de Defensa de la capital anunció el sábado un paquete de 22 limitaciones que afectan a los sectores de la salud, educación, transporte, turismo, gastronomía, empleo y el trabajo autónomo. Por caso, el transporte público (estatal y privado) no podrá circular de nueve de la noche a cinco de la mañana, y a partir del día 12 se suspenderán las conexiones con el resto de las provincias.

También se cerraron de nuevo los bares y centros de ocio nocturno, cines, teatros y parques recreativos; se suspendieron las visitas familiares a las prisiones; y se prohibieron -bajo amenaza de altas multas e incluso prisión- las fiestas particulares, a las que las autoridades achacan un alto porcentaje de los rebrotes durante las celebraciones de fin de año.

Finalmente, ratificaron que las escuelas se mantendrán abiertas por ahora, así como el aeropuerto José Martí, que seguirá operando con las restricciones vigentes.