La aerolínea boliviana BoA se reestructura para sobrevivir

Este viernes 12 de febrero, la aerolínea estatal Boliviana de Aviación (BoA) confirmó que avanzará en un proceso de reingeniería para garantizar la sostenibilidad de la empresa, luego de las millonarias pérdidas a causa de la pandemia (hoy tiene una deuda a corto plazo de US$ 40 millones) y en el marco del nuevo armado de gestión del presidente Luis Arce.

Vale recordar que en marzo de 2020, el Gobierno de facto de Bolivia decidió cerrar el espacio aéreo para vuelos comerciales nacionales e internacionales, obligado por la emergencia sanitaria. Sin embargo, a pesar del incremento de los casos positivos, a principios de junio se permitió la apertura gradual de algunas rutas locales de BoA.

También mediados del año pasado, el Poder Ejecutivo dispuso un desembolso de US$ 4,3 millones de dólares para que BoA pudiera seguir operando. La lenta recuperación de la demanda y las restricciones en mercados clave para la compañía (como Europa, EEUU y Argentina) profundizaron las dudas sobre su sustentabilidad.

En diálogo con la agencia EFE, el gerente general de BoA, Ronald Casso, explicó que el “rediseño institucional” de la empresa se centra en “cambiar la estructura piramidal a una más plana, de trabajo por equipos, para optimizar los recursos”, así como el uso de su flota.

Persiguiendo esa meta, la aerolínea estatal enfrenta actualmente dos negociaciones clave: una con los acreedores y otra con los sindicatos. Respecto al primer desafío, se informó que se está dialogando con distintos acreedores la deuda a corto plazo por los mencionados US$ 40 millones. Y en cuando a los gremios, se puede entender claramente que la reestructuración implica reducción de plantilla y de salarios, como está sucediendo en casi todas las compañías del mundo.

En el transcurso de la última semana, en una carta dirigida a Casso, el Sindicato de Pilotos de BoA denunció acoso laboral, intimidación y despidos de varios de los trabajadores. Consultado por la prensa, el ejecutivo de la empresa sostuvo que no era un “tema grato” y se limitó a explicar que han tenido que “tomar decisiones para reducir los costos de la empresa, y eso ha significado la necesidad de retirar a 6 pilotos de una plantilla de más de 120”.

Además, como se mencionaba, adelantó que habrá una reducción salarial para todos los empleados y que “es un sacrificio" que se debe hacer hasta lograr la sustentabilidad la empresa. ¿Cuándo podría ocurrir eso? Basándose en los buenos resultados de enero, BoA afirma que en junio próximo podría lograrse una normalización casi plena, siempre que la situación epidemiológica lo permita.