Aerolínea brasileña Azul perdió US$ 1.934 millones en 2020

La aerolínea brasileña Azul dio conocer sus resultados financieros de 2020 y, como se preveía, confirman que se trató de un año para el olvido, como consecuencia de la pandemia, declarada en marzo, y de las restricciones.

La tercera mayor del país perdió en consecuencia R$ 10.834 millones (unos US$ 1.934 millones), lo que se traduce como una caída de 350,9%, en comparación con el mismo período del año anterior.

Este negro resultado se consolidó a pesar de verificarse una fuerte desaceleración de ese desplome en el último trimestre. Hubo pérdidas, pero estas fueron de R$ 317,4 millones (alrededor de US$ 56,6 millones), es decir, el mejor balance de la compañía desde que comenzó la crisis sanitaria.

Pese a la pandemia, Azul redujo hasta seis veces sus pérdidas en el último trimestre de 2020, y esto se debe a la rápida desescalada de los vuelos domésticos en Brasil, iniciada en junio

A pesar de la grave situación sanitaria en que se encontraba el país, desde junio no han parado de crecer los números de movimientos domésticos en Brasil.

El beneficio bruto de explotación (Ebitda) entre enero y diciembre de 2020 cayó 92,7%, hasta los R$ 264 millones (US$ 47,1 millones), mientras que la facturación neta fue de R$ 5.793 millones (alrededor de US$ 1.034 millones), lo que equivale a un 49,4% menos que en 2019.

De ese modo, la caja de la empresa saltó hasta los R$ 4.000 millones (alrededor de US$ 714 millones) con la gestión de gastos. “Hace un año teníamos R$ 2.300 millones en caja (US$ 410 millones), sin ninguna expectativa de vacuna en el horizonte y con apenas 70 vuelos por día. Un año después tenemos R$ 4.000 millones en caja, 220 millones de vacunas previstas para llegar en los próximos cuatro meses y más de 700 vuelos diarios", resaltó el CEO de Azul, John Rodgerson.

En cuanto a su deuda bruta, Azul cerró diciembre de 2020 debiendo R$ 17.156 millones (unos US$ 3.236 millones) que, pese a ser una cifra exorbitante, es también un 4,5% menor a la del tercer trimestre del año, gracias a la apreciación del real frente al dólar. Desde luego, en una comparación interanual (contra diciembre de 2020), la deuda bruta aumentó un 14,2%.

En términos operativos, según el balance de Azul, en 2020 la empresa transportó a 5.088 millones de pasajeros, lo que supone menos de la mitad que en los movilizados en 2019.

Pese a este oscuro punto de partida, Rodgerson lo considera un “desafío” y se mostró optimista de cara a este 2021 en curso, especialmente cuando acelere el proceso de vacunación en el país. Vale recordar que hoy Brasil atraviesa su peor momento de la pandemia, con un récord diario de muertes.

En ese sentido, la aerolínea resaltó que la recuperación de la demanda doméstica en Brasil ha sido una de las más rápidas del mundo e informó que la capacidad de vuelos domésticos de Azul ya alcanzó en diciembre el 91% de lo volado durante el mismo periodo del año anterior. Y en el primer trimestre de 2021 espera superar la capacidad de los primeros tres meses de 2019.