Hoteles de Buenos Aires: “Creemos que tenemos el 2021 totalmente perdido”

Los datos publicados por la Ahrcc afirman que en Buenos Aires abrieron apenas un 20% de los hoteles de la ciudad, y que estos tienen una ocupación inferior al 10%. ¿Cuál es la situación hoy?

- Efectivamente, más del 80% de los hoteles están cerrados desde hace un año y no volvieron a abrir. El 20% que sí abrió tiene ocupaciones de entre el 5% y el 8%. La hotelería hoy por hoy está prácticamente cerrada en la ciudad de Buenos Aires. La única fuente de demanda que nos quedó -que es mínima- es la de turismo interno, que encima se ve desfavorercido, porque los atractivos que tiene la ciudad son básicamente culturales, como los teatros y los recitales. Y el internacional está cerrado. La otra fuente de demanda para la hotelería, que son las ferias y los congresos, también paralizados. Nuestra demanda hoy es prácticamente nula.

¿Cuánto impactan en esa realidad los factores estacionales? Porque la demanda histórica de Buenos Aires en verano de por sí es baja, y en cambio suele tener en esa época muchos visitantes internacionales, que hoy no están llegando, como es el caso de los cruceristas.

- Mucho. La llegada de los cruceros es nula. En cuanto a los países limítrofes, cuando se iba a levantar un poquito Chile, le llegó la segunda ola; Brasil está complicado; y Uruguay ahora también está afectado. Toda Sudamérica está muy complicada con el COVID-19, y eso le pega de lleno a la hotelería, sin dudas.

¿Y cómo están haciendo para sobrevivir?

- Hubo algunos apoyos estatales que hicieron que la actividad no terminara de colapasar. Básicamente hablo de los ATP, que fue una ayuda del Gobierno nacional, con la cual abonaba casi el 50% de los sueldos de los trabajadores. Eso ayudó bastante, pero se terminó en diciembre. A partir de enero, recibimos otro tipo de apoyo, que se llama Repro 2, que da AR$ 12.000 por cada trabajador, lo cual representa aproximadamente un tercio de lo que cobran. Y a esto se suma una ayuda extra del Ministerio de Turismo y Deportes, de AR$ 4.000. Ahora, el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires está mandando a la Legislatura el proyecto para eximirnos del impuesto al Alumbrado, Barrido y Limpieza (ABL) por seis meses. Y también subsistimos con créditos blandos y ahorros propios. Así y todo, cuando uno mira los portales de venta de inmuebles puede ver que está en venta entre el 25% y el 30% de la capacidad hotelera porteña.

(Ver: Gobierno argentino confirmó la nueva ayuda económica a empresas turísticas y Un año después, Buenos Aires analiza dar alivio tributario a sus hoteles)

¿Cuántos hoteles cerraron definitivamente como consecuencia de la pandemia?

- No tenemos ese número, porque hoy tenemos el 80% de los hoteles cerrados y no sabemos cuántos van a volver a abrir. De lo que sí nos damos cuenta es de que si en los portales está a la venta el 30% de los hoteles, eso quiere decir que la crisis va a ser muy profunda, porque aparte ya corrió mucho tiempo en este estado.

¿Por qué entienden ustedes que el Gobierno porteño demoró más de un año en otorgar algún tipo de alivio impositivo?

- A nivel económico, podrían haber hecho esto que están haciendo, que es la eximición del ABL, pero también eximirnos de Ingresos Brutos, que es otro impuesto que nos cobran y no tiene mucho sentido, porque al estar cerrados nuestro ingreso es cero. Sí hubo un apoyo concreto desde el Banco Ciudad. Pero la verdad que lo otro que podrían haber hecho era acreditar algún tipo de ATP desde la propia Ciudad. Lamentablemente no lo hizo, porque indudablemente las cuentas no deben ser las mejores en este momento, y entendemos que no es fácil.

¿Cuáles son las expectativas para el resto del año?

- No tenemos buenas expectativas. Pensamos que con suerte podríamos empezar a trabajar en octubre o noviembre, pero ya nos agarraría de vuelta la baja por el verano. Por eso creemos que tenemos el 2021 totalmente perdido.

¿Qué significa “totalmente perdido”?

- Una demanda que tiende a cero. Cuando uno hace un viaje, no lo hace de hoy para mañana: uno lo programa con cierto tiempo. Si nosotros estamos viendo que hay una segunda ola en toda Sudamérica y que las vacunas todavía no están llegando en la cantidad necesaria, eso significa tiempo, y ese tiempo la hotelería lo va a pagar con falta de demanda.

¿Ayudaría en algo tener una herramienta como fue el programa PreViaje?

- Toda ayuda para el sector es bienvenida, pero lo que necesitamos básicamente es movilidad. Si la gente no tiene movilidad, es imposible.

¿Cuánto se siente la falta del corporativo? Porque es un segmento clave para un destino como Buenos Aires…

- Esta carencia se ve muy claramente en la gastronomía. Todo el Micro y Macrocentro, además de Puerto Madero, que trabajan básicamente con oficinas, están desiertos. Hoy han cambiado las metodologías de trabajo hacia el teletrabajo, y eso provocó que varias zonas de la ciudad estén sin gente. A veces parece una ciudad fantasma.