Marcha atrás de Chile en apertura de fronteras genera rechazo del turismo

Las autoridades de Salud de Chile prohibirán a partir de este miércoles 1 de diciembre el ingreso de viajeros que provengan de siete países del sur de África por precaución ante el avance de la variante de covid-19 ómicron.

Los afectados por la restricción serán todos los extranjeros no residentes que hayan estado en Sudáfrica, Zimbabue, Namibia, Botsuana, Lesoto, Esuatini y Mozambique en los 14 días anteriores a su viaje a Chile.

Los chilenos y extranjeros residentes que provengan de esos siete países deberán cumplir una cuarentena obligatoria de 7 días aunque el el resultado del PCR que se realicen al momento del ingreso sea negativo.

El resto de extranjeros podrá seguir ingresando, en caso de haber completado su pauta de vacunación, a través de los cuatro aeropuertos que se habilitaron en octubre: Santiago, Iquique, Antofagasta y Punta Arenas (en el extremo sur).

La variante ómicron, detectada por primera vez en Sudáfrica, se ha extendido ya en casi medio centenar de países y la Organización Mundial de la Salud (OMS) la ha categorizado como "de preocupación".

Rechazo del sector turismo

Ricardo Margulis, presidente de la Federación de Empresas de Turismo de Chile (Fedetur), dijo a El Mercurio que la postergación de la apertura de pasos fronterizos "es una muy mala noticia".

Dijo que para este verano se estimaba –en las condiciones de frontera vigentes- que llegaran al país unas 200.000 personas, lo que calificó como “una cantidad bastante marginal” si se compara con el verano de 2018-2019, con 2,4 millones de extranjeros, y la temporada post estallido social 2019-2020, cuando se habían reducidos los ingresos casi a la mitad, 1,2 millones, previo a la pandemia.

Si ya las proyecciones "no eran buenas, ahora con esto tenemos que rearmar nuestras proyecciones. Esto es un balde de agua fría". Ricardo Margulis, Fedetur.

Tomás Sahli, presidente de la comisión de Turismo de la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo (CNC), dijo a El Mercurio que desde el sector se insta al gobierno a "tomar decisiones de cierre con prudencia y cautela, esperando la información que nos vayan entregando los expertos. Llamamos a no atemorizar de antemano a la población sin tener información formal de cómo reaccionan las vacunas a esta nueva variante".

Desde la Asociación Chilena de Líneas Aéreas se indica que "las perspectivas para la temporada alta son más bien positivas, y el hecho de volver a implementar medidas restrictivas, más allá de todas las medidas que siguen funcionando, sería un balde de agua fría para la industria aérea, el turismo receptivo, las regiones, las comunidades locales, etcétera. Y toda la cadena que de alguna u otra manera se ve beneficiada por la llegada de turistas extranjeros".

"No creemos que las restricciones de entrada y salida a los países sean la medida que solucione la propagación de una nueva variante. Es el proceso de vacunación y las medidas de autocuidados, las que están en directa relación con la propagación de una variante en particular”: ACHILA