La Ruta Internacional de los Jesuitas cada vez más cerca

La idea de estos cinco países es potenciar el patrimonio jesuítico y generar un eje conceptual articulador, sustentado en la identidad histórica común, que integre a todas las misiones. Entre otras cosas se propone promover la integración social, cultural, económica, física, turística, jurídica y comunicacional con proyectos específicos de implementación.

Para hacer de esto un producto unificador todos juntos haran campañas de comunicación y comercialización internacional que permita posicionar las misiones jesuíticas en todo el mundo.

Dentro de Argentina la provincia de Misiones tiene 11 pueblos y más de 15 sitios arqueológicos de pueblos transitorios de jesuitas; en Corrientes son cinco pueblos más sitios arqueológicos del complejo de estancias en la Cuenca del Río Aguapey y Esteros del Iberá; y en Córdoba se encuentra el Complejo de estancias de la Compañía de Jesús.

San Ignacio Miní (Misiones) es una de las misiones declaradas Patrimonio de la Humanidad.

En Paraguay son ocho pueblos y sitios aqueológicos; en Brasil siete y están vinculados al complejo de estancias; lo mismo sucede en Uruguay, mientras que en Bolivia se encuentran las Misiones de Chiquititos.

Para el ministro de Turismo argentino, Gustavo Santos, con la firma del acta de intención “se inicia un nuevo camino de revalorización de nuestro patrimonio histórico común, y construcción de un futuro mejor e integrado regionalmente”, remarcando que “para esto es necesario transformar el patrimonio jesuítico de Sudamérica en un producto turístico integrado, competitivo y de calidad, con sustentabilidad social, cultural y natural”.

En ese sentido volvió a hacer referencia a la necesidad de tener una identidad regional, “trabajar en al construcción de la Marca Sudamericana, que comparta productos tales como la Ruta Internacional de los Jesuítas”.

Vale recordar que en América Latina la evangelización de los sacerdotes jesuitas en pueblos originarios se dio durante los siglos XVII yXVIII. Siete de las misiones han sido declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO: una en Brasil, cuatro en Argentina y dos en Paraguay.