Primera nave semisumergible de Argentina para ver ballenas

Héctor “Tiño” Resnik y su mujer Silvina Garzonio, dueños de la firma Southern Spirit, se asociaron con la inversora Julitte Decré para concretar el proyecto privado inspirado en embarcaciones utilizadas para observaciones submarinas en la barrera de arrecifes de Australia, en el Caribe y en el Mar Rojo, según publica Telam.

La nave de 15 metros de largo por cuatro de ancho comenzó a construirse en enero de este año y esperan que sea botado en octubre. De acuerdo a lo detallado por la agencia estatal, entre los dos pontones laterales que harán de flotadores habrá un tercer compartimento bajo la superficie, que será el salón de pasajeros, “quienes podrán permanecer sentados en ese sector bajo el agua o subir a la cubierta en superficie durante los viajes”.

El barco está siendo construido en un astillero de Mar del Plata.

La embarcación estará propulsada por dos motores de 50 HP cada uno, que le darán una velocidad máxima de seis nudos. Según Resnik, se decidió que sea poca la velocidad porque “queremos que todo el tiempo el turista esté haciendo observación de ballenas” y afirma que será “como verlas a través de una máscara de buceo”.

Explicó que el barco tendrá medidas similares a las que parten de la reserva provincial Península Valdés, con el agregado que bajo el agua tendrá mayor volumen lo que permitirá que haya espacio para 40 pasajeros, con sus respetivos asientos y ventanas.

El proyecto cuenta con el respaldo del gobernador Martín Buzzi y del secretario de Turismo, Carlos Zonza Nigro; antes de ser trasladado a Chubut para comenzar con avistajes experimentales, se realizarán pruebas de navegación en la costa bonaerense.

Desde la empresa que operará esta embarcación, aclaran que costará el doble que las naves actuales (aproximadamente US$ 170 por persona adulta) y tendrá salidas diarias al mediodía.