Tierra Sinaí propone experiencias singulares en Oriente Medio

Algunas propuestas para disfrutar de una experiencia inolvidable en destinos singulares y de gran belleza:

Viaje en globo por la Capadocia en Turquía. Una actividad que permite disfrutar de uno de los paisajes más bellos y originales del planeta, más hermosos aún si el recorrido coincide con el amanecer o el atardecer. Desde varios metros de altura se obtiene una excelente panorámica de las Chimeneas de las Hadas y del desierto. Una experiencia que merece la pena añadir en un viaje a Turquía por unos 150 euros e incluso menos según las ofertas del momento.

La Capadocia, Turquía.

Bucear en el Mar Rojo. Es, sin duda, uno de los mejores lugares del mundo para practicar el buceo. El Mar Rojo es un lugar de gran belleza y ofrece una enorme biodiversidad, con más de 1.200 especies de peces. Se puede disfrutar de este lugar tanto en Egipto como en Jordania, aunque la costa egipcia ofrece una mayor oferta de resorts y hoteles y propuestas turísticas más variadas. Otro detalle a tener en cuenta es que, una vez en este país, es una actividad muy económica. Para llevarse uno de los mejores recuerdos del viaje, se recomienda llevar una cámara submarina.

Las Pirámides de Egipto. Una buena muestra del singular patrimonio histórico de esta región son las pirámides de Keops, Kefrén y Micerinos, incluso es posible acceder al interior de las dos primeras. Además, se puede disfrutar de un viaje al desierto y la Esfinge. Egipto es siempre una buena opción para un viaje, más enriquecedor aún si se incluye en el recorrido El Cairo y un crucero por el Nilo.

Recorrido por Petra. La ciudad esculpida de Jordania, con casi 3.000 años de antigüedad, es uno de los lugares más impresionantes del planeta. Constituye un destino obligado por los amantes de la arqueología y las antiguas civilizaciones, pero tampoco deja indiferente al viajero menos experto.

Explorar el desierto de Wadi Rum en camello. Declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 2011 y situado en el sur de Jordania, este desierto es uno de los lugares más bellos del mundo. Su intenso color rojizo, capaz de transportar al viajero a la época de Lawrence de Arabia, le convierte en un paraje único. Una buena opción para recorrerlo es hacerlo a lomos de un camello o incluso a caballo, según las preferencias del viajero, junto a un guía que relatará los secretos e historia que rodean este lugar mágico.

Desierto de Wadi Rum, en Jordania.

Cada una de estas opciones merece un recorrido específico y calmado, pero también existe la posibilidad de combinar todos estos destinos en un único viaje y con precios muy económicos.