El nuevo CEO de Uber sacará a Bolsa a la startup

Este amplio lapso da al directivo cierto margen para restablecer el orden en una compañía que lleva meses envuelta en escándalos y problemas legales y para apuntalar las pérdidas de más de 3.000 millones de dólares registradas el año pasado; si bien se trata de la empresa más valiosa según las rondas de financiación recientes en las que ha alcanzado un valor de unos 68.000 millones de dólares.

Sin duda, Khosrowshahi se enfrentará a desafíos, incluyendoconflictos con reguladores y operadores de taxis, una cultura de empresa para algunos “feroz” y enfrentamientos entre miembros del consejo e inversores. Con Uber, Khosrowshahi hereda, en concreto, una empresa asediada por meses de escándalos que implican acoso sexual en el lugar de trabajo y prácticas cuestionables en el lugar de trabajo. Así como una batalla legal con la empresa autodidacta Waymo, lanzada por Google (GOOG, GOOGL) a finales de 2016.

“Esta empresa tiene que cambiar”, aseguró Khosrowshahi, según Uber. “Lo que nos ha traído aquí no es lo que nos va a llevar al siguiente nivel”.

Khosrowshahi, de 48 años, terminó su discurso de presentación con tres premisas que la plantilla de Uber debe tener presentes: “Seré totalmente transparente con ustedes. Voy a luchar con ustedes y espero que se unan a mí en esa batalla. Y, por último, todo el mundo va a participar y puede contribuir al éxito de Uber a su manera, porque todo el mundo es diferente y tiene sus propios conjuntos de habilidades…”.

El nuevo CEO de Uber también ha anunciado a los empleados que la compañía contratrá a un presidente. Actualmente, este cargo es ejercido por Garrett Camp, cofundador de la startup, pero se espera que sea sustituido y permanezca como director.

El primer día oficial de Khosrowshahi en Uber es el martes 5 de septiembre.