Las torres de control liberalizadas operarán con nuevos proveedores en 2013

Así lo ha asegurado el director de Navegación Aérea, Ignacio González, quien señaló que, en principio, no está decidido avanzar más allá de la liberalización del servicio de control en torre. Explicó que el cambio de proveedor es un proceso "muy complejo" que requiere de un plan de transición que implica la transferencia de espacios aéreos, la creación de un procedimiento y de mecanismos de control, la formación de los controladores entrantes y una coordinación adicional.

En diciembre de 2010, el Ministerio de Fomento anunció que en 2011 liberalizaría el servicio de las torres de control de 13 aeropuertos y que todas las torres de España estarían liberalizadas en 2012. El nuevo Gobierno no ha precisado si mantendrá este objetivo.

El 29 de diciembre fue publicada en el Boletín Oficial del Estado (BOE) la Orden de Fomento que seleccionó los 13 aeropuertos: Alicante, Valencia, Sabadell, Ibiza, Jerez, Sevilla, Melilla, Lanzarote, Fuerteventura, La Palma, A Coruña, Vigo y Cuatro Vientos, dando comienzo al proceso de liberalización del servicio de torres de control. A finales de septiembre, Aena Aeropuertos adjudicó a Ferrovial y Saerco el control de 13 torres.

Transición a partir de junio

Entre junio y julio, se pondrá en marcha el plan de transición en las torres liberalizadas de aeropuertos menos complejos como La Palma, Vigo, Cuatro Vientos y Fuerteventura, para posteriormente iniciar el proceso en los de mayor complejidad como Alicante e Ibiza, donde hay que tener en cuenta el repunte de la demanda de tráfico aéreo en verano.

En esta fase de transición, el proveedor del servicio de tránsito aéreo en los 13 aeropuertos será Navegación Aérea, aunque en las torres pueda coexistir el personal de control de Aena con el del nuevo proveedor, que estará en período de formación.

Con este proceso, los controladores tenían que decidir si se subrogan con los nuevos proveedores, ya que se liberalizarán un total de 170 controladores de Aena. No obstante, el 98% ha decidido no subrogarse a los nuevos proveedores.

El SPD en todas las terminales

Asimismo, dentro dela etsrategia de reducción de costes, hay que agregar la implantación del servicio de dirección de plataforma (SPD), adjudicado a la empresa Ineco, y que desde noviembre vienen realizando en la T4 de Barajas técnicos formados, en sustitución de controladores, con el consecuente ahorro de personal y de costes, ya que el sueldo de un técnico de SPD es un tercio del que cobra un controlador.

Este sistema se extenderá a partir del próximo 31 de mayo a las terminales T1, T2 y T3 del aeropuerto madrileño, mientras que en la terminal satélite, donde el SDP todavía no adjudicado, Navegación Aérea se presentará como proveedor.

Con la implantación del SPD --servicio de guiado desde el estacionamiento a la pista de despegue o aterrizaje-- en las terminales T1, T2, T3 y T4, se sustituirá a 24 controladores, a los que podrían sumarse los 12 de la satélite.

De hecho, en el aeropuerto de Barcelona-El Prat este servicio lo prestarán controladores, a partir del próximo mes de septiembre, tras un proceso de reorganización del trabajo que implica la reducción de posiciones. De esta forma, si actualmente hay 100 controladores operativos, se reducirán en un 30% los efectivos, parte de los cuales se reubicarán en centros de control donde sea necesarios.

Controladores: plantilla completa pero mal distribuida

González defendió que hay un número suficiente de controladores, unauq emla distribuidos, por lo que no está previsto contratar más. "Sobran en las torres y faltan en los centros de control", aclaró. De allí que van a redistribuir la plantilla, de unos 1.800 efectivos operativos, en un "escenario de contención del gasto" que implica también cambios de horarios y medidas operativas más efectivas.

Así, señaló que falta personal en los centros de control de Palma, Barcelona y Canarias, a los que podrían ir destinados parte de los controladores 'liberados' antes del verano de 2013.

Además, se está procediendo a adaptar los recursos de personal con la adopción de medidas como el desdoblamiento de aerovías, maximizar la flexibilidad de los controladores en diferentes puestos, o una configuración más dinámica para adaptarla a la demanda real del tráfico.